Matan a una menor de doce años de dos puñaladas
Todo comenzó en la noche del pasado miércoles 27 de abril cuando personal policial de la Departamental , con efectivos de la policía de Ramallo comenzaron a recorrer las inmediaciones de calle Oliva y el camino rural que une a la ciudad cabecera de distrito con Vuelta de Obligado, localidad del partido de San Pedro. “Vimos que el movimiento no era el normal, en el barrio frecuentemente han pasado hechos de robo o bien gente que no tiene un buen vivir, llega para usar alguna casa de "aguantadero", ahora lo que menos nos imaginábamos que iba a pasar lo que pasó” dijo un vecino que vive en la calle Oliva y que se había acercado hasta el lugar en la mañana del jueves para observar el dispositivo policial que llevó a que se movilizaran casi un centenar de policías de diferentes reparticiones. A las 8.30 del jueves la información circulaba en las radios la información, sin ser dada a conocer, cuidando algunos detalles que tenían que ver con que la familia pudiera enterarse primero por los medios, antes que fuera comunicado por las autoridades policiales y judiciales.
A las 9.15, fue entonces cuando se informó que el cuerpo de una niña sin vida había aparecido en un monte eucapliptus, mientras estaba siendo buscada desde el pasado lunes, en inmediaciones del Arroyo Las Hermanas. Se trataba de Priscila Aylén Schneider de 12 años de edad, domiciliada en Barrio Somisa, y cursaba sus estudios en la Escuela N ° 30.
“Todo comenzó con una denuncia por averiguación de paradero de una menor. En esas circunstancias se inicia la búsqueda temprana, hoy (por el jueves) hemos encontrado el cuerpo de la menor, no obstante, se lo derivó para hacer la autopsia en la ciudad de San Nicolás. Ha sido asesinada por una persona de su círculo intimo a nivel familiar”, informó en rueda de prensa el Comisario General, Superintendente, Zona Interior, Sergio Gabriel Zudaire.
Su tío abuelo, Ramón Almiron de 56 años, divorciado y con antecedentes penales, le propuso pasar unos días en Merlo, conurbano bonaerense. La niña, no era la primera vez que iba a viajar con su familiar. De hecho, varias fuentes consultadas por este medio, confirmaron que ya habían viajado a otros lugares. Todo estaba previsto para que regresaran a la ciudad de San Nicolás el día sábado para pasar el domingo de pascuas en familia. El sábado, en principio, Almirón regresó desde Buenos Aires, y se trasladó al domicilio de un vecino ramallense, ubicado en el barrio Avellaneda, allí dejó un bolso, donde estaba la carta, que según varias fuentes consultadas dieron cuenta de que había un “pacto de amor” entre la niña y el adulto. Los vecinos del barrio, coincidieron que a la niña, no la vieron caminar por el barrio, aunque algunos señalaron que había estado paseando por el centro de la ciudad de Ramallo con su tío abuelo.
Hasta ahí parte de la reconstrucción que tiene como agregado, dos llamados de su madre Valeria Sanchéz, uno en horas de la mañana donde habla con Priscila y otro en horas de la tarde donde no obtiene respuesta. A partir de allí, comenzó a generarse cierta preocupación por parte de Valeria, quién tuvo a Priscila en el primer matrimonio, junto a otros dos hijos. Valeria, además tiene otro, hijo del segundo matrimonio. Su actual pareja, acompañó a la joven Sánchez en la horrenda misión de reconocer a su hija que yacía en el campo de eucaplitus del camino rural.
Según las pericias, todo dio lugar a que el presunto homicida, Ramón Almirón terminara asesinando a la niña en la madrugada del domingo. Después Almirón, apareció en una cuneta mutilado, fue entonces que un vecino que circulaba en moto por el lugar lo ve y da aviso a la policía. Lo trasladan al hospital municipal, José María Gomendio y luego al Hospital Interzonal, San Felipe. Horas más tarde, Almirón huyó del San Felipe y se presumía que las lesiones se las había realizado, buscando ocultar el aberrante hecho que con el correr de los días se le imputó.
Según las pericias, todo dio lugar a que el presunto homicida, Ramón Almirón terminara asesinando a la niña en la madrugada del domingo. Después Almirón, apareció en una cuneta mutilado, fue entonces que un vecino que circulaba en moto por el lugar lo ve y da aviso a la policía. Lo trasladan al hospital municipal, José María Gomendio y luego al Hospital Interzonal, San Felipe. Horas más tarde, Almirón huyó del San Felipe y se presumía que las lesiones se las había realizado, buscando ocultar el aberrante hecho que con el correr de los días se le imputó.
El pasado domingo, llegó Almirón con un estado confusional al Hospital San Felipe lastimado, desconociendo las causales de los cortes y golpes. Presentaba cortes en los muslos, lesiones en ambas muñecas del lado de la palma, lesión en el tendón de aquiles y expresaba que no se acordaba lo que había pasado. Fue derivado del Hospital Gomendio de Ramallo, por pedido de los familiares directos. De allí se escapó el martes 26 a las 10.30 y desde entonces permanece prófugo. Al cierre de esta edición –jueves por la noche—la policía había realizado no menos de cinco allanamientos en la ciudad de Pergamino y zona de influencia. Ramón Almirón es de San Nicolás, y tiene antecedentes policiales relacionados a delitos sexuales. Estuvo aprehendido en la Comisaría Tercera por una denuncia de abuso y recuperó rápidamente la libertad. Ramón Almirón es de contextura robusta, mide 1,75 mts. de estatura, cutis trigueño, cabellos castaño oscuro cortos, ojos marrones y vestía camisa mangas cortas azul, pantalón de vestir negro y zapatillas negras con plateado, llevando consigo un celular.
Uno de los primeros lugares en los que este hombre fue buscado por la policía fue en una precaria vivienda del barrio Avellaneda, donde se encontró la carta supuestamente escrita por él en la que se leían frases como "estamos cansados de vivir en esta situación" y "ya no aguantamos más".
Jueves Negro
Pasado el mediodía del pasado jueves, el cuerpo de la menor fue depositado en la morgue judicial, a la espera de la autopsia que determinaría las causales de la muerte. Fue reconocido por su padre. El Comisario Inspector Biaín informó que se investiga una carta en la que el fugado habla de "un pacto suicida" con su sobrina nieta. Sospechan que podría haber asesinado a la menor tras lo cual se habría intentado quitarse la vida, pero sin éxito.
En tanto, el Dr. Jorge Leveratto, titular de la Unidad Fiscal Nº4 y quién instruye la causa, horas más tarde dispuso de una serie de medidas en procura de dar con Almirón. A media tarde se conoció que la autopsia determinó que el cuerpo de la menor Priscila Aylén Schneider tiene dos heridas punzo cortantes en el tórax. Una de ellas, en el corazón, que fue la letal. Se tomaron muestras de tejidos que fueron remitidas al Instituto Anatomopatológico para su estudio. La muerte data de más de tres días. Los forenses descartaron algún sometimiento sexual.
Los pesquisas allanaron una vivienda de la localidad bonaerense de Pergamino, donde se hallaron elementos que les hicieron suponer que el sospechoso buscado estuvo allí hasta la tarde del pasado miércoles. Sobre Almirón, el Comisario General, Sergio Zudaire, señaló que el hombre estuvo detenido como "sospechoso" y luego fue liberado por el crimen de Débora Giselle González (12), quien desapareció el 2 de mayo de 2007 y el 31 de ese mismo mes apareció asesinada y con signos de abuso, cerca de las vías ferroviarias, en San Nicolás. Y, por último, aclaró que sobre el sospechoso no pesaba actualmente una orden de detención. La causa por el homicidio de Priscila quedó en manos del fiscal Jorge Leveratto, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 del Departamento Judicial San Nicolás.
En tanto, el pasado viernes 29 de abril en horas del mediodía, Ramón Almirón fue detenido en la ciudad de Luján por una comisión policial, que lo trasladó hacia la ciudad de San Nicolás donde permanece detenido. Almirón se negó a declarar y este miércoles 4 de mayo la policía de Ramallo informó que había sido hallada un cortaplumas que podría ser el arma que utilizó el homicida para matar a la niña de 12 años.
Comentarios
Publicar un comentario